Muchas veces buscando el término PIEDAD, la definición llegó explicada de diversas manera y de manera muy explícita, pero siempre me quedaba con un algo que no entendí.
El día de ayer recibí de manera muy clara ese pedacito que siempre quedaba sin llenar y leí que PIEDAD es hacer lo que agrada a Dios.
A medida que aprendemos a depender más de nuestro Padre Celestial, cada vez que invertimos tiempo en acercarnos y conocerlo más, poco a poco se va desarrollando un inmenso deseo de que nuestras acciones, nuestras decisiones sean para agradarle, es un deseo profundo de agradar al Amado.
Entonces pienso que si la PIEDAD es hacer lo que agrada a Dios, es para mí la más poderosa combustión para que mi enfoque esté en seguir agradando a mi Señor.