DANDO EL PASO HACIA ADELANTE

Amado Señor, Tú que conoces hasta lo más profundo de mi corazón, conoces mis deseos, mis anhelos, las inmundicias que guardo y el profundo amor que te tengo.
Guíame para dar ese siguiente paso que dieron Bartimeo o aquella madre sirofenicia.
Bartimeo no puso atención a las críticas, ignoró a quienes querían callarle, tanto es así que cuando mandaste por él, el primer gesto que tuvo fue despojarse de su manto, ese manto que era su protección, ese manto que lo identificaba como minusválido.
La madre sirofenicia a pesar de tu respuesta negativa, no vociferó, no se retiró, reafirmó que Tú ya lo hiciste todo y creyendo desde lo más puro de su corazón volvió a poner a tus pies la necesidad de liberación de su hija.

No resbalaron en sus limitaciones, más bien las abrazaron y las utilizaron como un trampolín para reafirmar su fe en Ti.

Gracias Señor por mis limitaciones, gracias porque en mi debilidad se manifiesta tu grandeza!!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *