RECONSTRUYENDO

En el libro de Nehemías, para ser más específica en los capítulos tres y cuatro, encuentro tanta riqueza en la enseñanza de Dios.

Hoy quiero hablar del momento en que Nehemías está reconstruyendo la muralla, específicamente donde describe que ya habían levantado la muralla hasta la mitad y comenzado a rellenar los huecos de la muralla, fueron avisados que muchos venían de varios lugares para atacarlos. Nehemías distribuyó a la gente para que siempre se mantuvieran alerta sin dejar de reconstruir y dijo esta oración: «Acuérdense del Señor grande y formidable, y peleen por sus hermanos, hijos e hijas, por sus mujeres y por sus casas».

El punto que llamó mi atención es que cuando vamos levantando esa muralla en nuestra vida, talvez, rellenando huecos en nuestra fe, en nuestro caminar con el Señor, siempre va a estar presente el murmullo de la duda, del miedo, el murmullo que guía nuestra atención hacia nuestros límites, hacia lo que nos desalienta, pero si recordamos en esos instantes que Dios está con nosotros, seguiremos adelante con la obra.














Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *