A. W. Tozer escribió:
«Un verdadero cristiano es un número extraño de cualquier manera. Él siente amor supremo por UNO que ni siquiera ha visto, conversa de manera familiar cada día con ALGUIEN a quien no puede ver, espera ir al cielo gracias a la acción de OTRO, se vacía a sí mismo para ser lleno, admite que está equivocado para poder aceptar de que está en lo correcto, se rebaja para ser exaltado, su fuerza se presenta cuando es débil, es más rico cuando es pobre, e inmensamente felíz cuando sufre. Muere para poder vivir, se despoja de lo que tiene para poder tener, da lo que tiene para estar lleno, ve lo invisible, escucha lo inaudible y entiende todo lo que está arriba del conocimiento.»