Cuando pienso en el cuarto misterio de Gozo del Santísimo Rosario, en algunas ocasiones mi atención se enfoca en partes que habían pasado ante mis ojos sin poner atención; hoy me he enfocado en el momento en que Simeón toma al Niñito Jesús en sus brazos, en el día en que es presentado en el templo.
Agradece a Dios el haber visto realizada la promesa de que no moriría sin antes conocer al Salvador del Mundo y en su momento de gozo, le dice a la Santísima Virgen María que una espada atravesaría su corazón, tanto ella como San José al escuchar aquella profecía, seguramente sintieron como su alma se llenaba de angustia, como su corazón se apretaba ante tal noticia. ¿Cómo era posible que ante tanta alegría, se hubiera producido una noticia que los llenó de incertidumbre?
Hay una hermosa enseñanza, un propósito divino, como en todo lo que acontece, he aprendido a que pese a cualquier circunstancia que nos rodee, sólo debemos confiar, estoy segura que ellos no permitieron que ese anuncio, estorbara en el gozo de ser una familia, recibiendo y gozando de las bendiciones de compartir y disfrutar lo que Dios tenía para ellos en cada día de sus vidas. Fue un anuncio revelado con tanta anticipación, como para volverse locos, esperando cada día lo que estaba por pasar, sin embargo cubiertos con el poder del Espíritu Santo, gozaron de su vida familiar.
Ayúdamos amado Señor, a confiar en Tí, sabiendo que eres el Dios quien tiene el control de todo, quien trabaja todo en conjunto para nuestro bien.
Muchas gracias amadísimo Padre!!!!!!.